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Sumario Ep. 2: Akriila, viento en popa

Con diez canciones en Spotify logró pisar el escenario de Primavera Sound 2022 con un bate rojo en mano. Pero hoy está en su estudio y mueve las manos encima de su regazo esperando que comencemos la entrevista.

Puede fácilmente ser contestataria, escribir sobre su polola y sus principios como artista y personaje idealista dentro del trap y reggaeton nacional. Su estilo agresivo y cute, con pasamontaña, polainas, y su explosiva performance son los principales atributos que hacen de Akriila un nombre interesante en la escena urbana de Santiago. Su perfil de Soundcloud está activo desde el glorioso año 2020 cuando estaba en tercero medio y el covid ya estaba en Chile . La incertidumbre de la pandemia le dio el coraje a Akriila, en ese entonces con diecisiete años, para subir las canciones que luego le darían fama de artista en su colegio en Maipú.

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Ahora va al estudio a producir y grabar voces, va a la par con el productor musical, con libreta en mano para crear una melodía que sea lo más suya posible. El proyecto Akriila resume y representa en Chile a la nueva generación de mujeres raperas del Cono Sur en la misma sintonía que Sara Malacara, Taichu y Lara 91K.

Se presentó en la esperada primera versión de Primavera Sound en Chile, con la energía por el cielo, un bate rojo en mano y unas trenzas japo, como número parte del show del colectivo “Mamacitas” que junta a artistas representantes del under del urbano con el fin de crear una red femenina en el circuito. Semanas después ganó el Premio a Mejor Rookie del canal de música y cultura urbana La Junta, así cerró su 2022.

El éxito de Akriila no la hace desear andar más rápido, más bien quiere mover bien sus piezas a nivel creativo. Ya anunció que pronto sacará un mixtape con siete canciones, con influencias de Anita Tijoux, Rosalía y Juicy Bae, ese es el plan para el 2023. También hacer una taza para la colección de elementos realizados en colaboración con HIsterya Colectiva para Sumario.

 

La posibilidad de internacionalizar su carrera es inminente, pero asegura que “dedicarse a la música es como colgar de un hilo, como colgar de la moda, de que si te querí pegar, de que por casualidad te pegaste, es algo muy ambiguo, algo muy de suerte y siento que no es un camino bien hecho o estructurado. Como artista vas solo al final, vas encontrando a gente con la que bacán y todo, pero al final nadie conoce lo que tú haces más que tú, nadie puede entender la manera en la que tú entiendes tu trabajo.”

L: Partiendo un poco sobre tu proyecto; tu nombre artístico es Akriila pero tu nombre verdadero es Fernanda ¿o no?, cuál es más o menos tu background.

 

A: Yo crecí toda mi adolescencia y mi niñez en Maipú, con mi mamá y mi papá, y ahí fui rotando por casa y ahora estoy en La Reina (risas).

 

L: Ya, y en qué momento crees que parte en tu vida el Proyecto Akriila, cuál es el hito que tu crees que marca o fue algo que pasó nomás.

 

A: Es que al final como empezó, fue yo en el colegio  tratando de descubrir quien soy en cuarentena darme cuenta de que me gustaba la música tanto como para dedicarme a eso, como que fue como yo sola en una pieza como queriendo experimentar con una guitarra o con otras cosas, y fue como ya, me voy a comprar un beat y me salió como cinco lucas dando vueltas.

 

L: ¿Y crees que como el hecho de tener que estar encerrada, o el hecho de tener esa cantidad de tiempo influye en haber hecho eso?

 

A: Obvio que si, me pasa que... osea sigo teniendo este pensamiento de que de cierta forma el sistema educativo mata a muchos artistas porque al final es como: tu tienes que tener estas notas, tu tienes que estudiar, tu tienes que irte para la u, tu tienes que hacer esto, y es como que todo va tan rápido que a los 18 tienes que pensar en lo que quieres hacer en toda tu vida y probablemente ni siquiera te das cuenta de que vas por otro lado equivocado, cachai, yo me descubrí por eso, yo siempre he dicho que si yo hubiese seguido, y no hubiera cuarentena ni nada yo probablemente estaría estudiando como pedagogía o  licenciatura en historia o algo así porque yo pensé que iba a ser profe al final, como toda mi familia es del colegio, toda mi familia, pensé que yo también, así que si no fuese por descubrir y encerrarse, y estar obligado a saber quien eres, no estaría haciendo música cachai.

 

L: Y ahora que ha pasado un tiempo desde el 2020, ha pasado tu carrera musical, en qué punto de tu carrera, de tu proyecto, piensas de tu estado actual.

 

A: El otro día estaba hablando de esto con un amigo mío y yo le decía que era como estar en una cuerda floja, como te caí y cagaste. Siento que dedicarse  a la música es como colgar de un hilo, como colgar de la moda, de que si te queri pegar, de que por casualidad te pegaste, es algo muy ambiguo, algo muy de suerte como hoy en día y siento que por eso es como que no un camino bien hecho o estructurado, nadie va a sentir que lo tiene todo en todo momento, hay muchas cosas pasando que al final vay solito tratando de no caerte o no tomar malas decisiones, que al final se sienten mucho más que una mala decisión en una oficina cachai, como que teni un equipo de 40 personas que estudiaron lo mismo que tu para resolver eso y siento que cuando uno igual es artista como que vay solo al final, vay encontrando a gente con la que bacán y todo pero al final nadie conoce lo que tú haces más que tú cachai, y eso pa mi es brígido, pensar que nadie puede entender la manera en la que tú entiendes tu trabajo.

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L: Y cómo manejai esas presiones, porque eventualmente tú eres el producto de tu trabajo, todo te llega a ti.

 

A: Esque al final yo, como soy afortunada de tener un equipo, siempre he tenido un equipo, o sea en un momento fueron otras personas, ahora son otras personas y nunca he estado sola, siempre decisiones se toman en grupo y errores se hablan en grupo y ojalá no se vuelvan a cometer y al final es algo que hay que cuidar, como que todos tenemos que cuidar todo de la misma manera en la que ellos tienen que cuidar, lamentablemente, porque recae en mi y yo también tengo que cuidar como lo que yo hago y lo que yo digo y lo que yo pienso, en lo que yo acciono más que nada como para reflejar un proyecto en el que todos estamos de acuerdo, cachai, porque al final eso es, si estay en un proyecto es porque te gusta y tu crees fielmente en eso cachai, y eso es muy ambiguo porque podi ir cambiando, y te vay a cambiar de proyecto de allá pa acá pero al final es como, todo recae en todo, entonces eso es un poco difícil de trabajar, pero en equipo todo se y creo que comunicando todo es mucho más lindo de lo que se escucha, es lindo sentir apoyo, es necesario al final.

 En mi proyecto, en temas de sonido musical, siempre estoy trabajando como con muchos productores dependiendo de lo que quiera hacer, de lo que busque, y creo que la persona que más me ha ayudado y ha apostado en mi proyecto ha sido el Saito. Yo no empecé con él pero lo tenía todo el rato al lado y nunca me di cuenta de que él era el weon con el que yo iba a decirle como, wn vente y que se yo, es muy extraño. Y ya como en temas de compañía, yo estoy en DFA, que es un sello independiente que está el Monswang y Papy, y el sello empieza por mi al final. Ellos hacían un evento en el que asistimos nosotras como Airoxi, como que “hosteabamos” por así decirlo, y yo fui la única que llegó a la reunión y les gustó lo que yo hacía y cómo hablaba, así que fue como ya, empecemos este sello, bacán, y de ahí es como que nace y se construye todo. Mi proyecto es muy emergente cachai, entonces todos hacemos todo, si yo tengo algo que hacer mañana, tengo que estar con estas dos personas porque yo no puedo hacerlo sola, no puedo llegar sola a las cosas, y eso me ayuda mucho en ese aspecto, es importante no sentirse solo en un proyecto, y eso al final, el sello somos yo y el Facebrooklyn

 

L: Y respecto como al lugar en el que estamos ahora, y la manera de trabajar, ¿crees que has logrado una especie de metodología?.

 

A: Esque al final siento que como que vas creando todo el rato, este es mi lugar para crear afortunadamente, llego con ideas, llego ya pensando con qué productor voy a trabajar, le digo quiero esto, le envío canciones, me gusta esto. Estoy siempre con un cuadernito en donde anoto mis ideas. O sea si, trato de escribir como de cosas que no se vayan repitiendo, tengo la metodología de mientras se va haciendo la pista yo viendo melodías, voy haciéndolo como a la par con el productor, como que nunca me ha gustado como escuchar un beat y montarme al tiro cachai, como que me gusta trabajar de cero.

 

L: Y en este momento estás trabajando en algo nuevo?, cuáles son los planes que están surgiendo en el proyecto Akriila.

 

A: Osea ahora estoy terminando una mixtape, que la venía trabajando desde el año pasado, como Junio, que la empecé ahí muy al lote y nada, siento que eso es lo que se viene para mi, después de eso no sé lo que voy a sacar, antes de eso tampoco, pero sí estoy segura de que se viene ese proyecto que son 7 canciones que para mi son increíbles y es como como el cierre… osea el abrir y cerrar como de una etapa mía. El año pasado estuve muy callada musicalmente y creo que la gente espero mucha música que no hubo y para mi es como, tomen una mixtape de cosas que tuvieron que haber escuchado en algún momento, y perdón si fue como ahora lo que están escuchando, pero era para otra ocasión cachai, pero igual lo voy a sacar porque me encanta, osea me encanta lo que hago, me encantan esos temas, me encanta la manera en la que se formaron y es como no lo voy a dejar de sacar porque ya pasó el tiempo cachai, como que lo voy a sacar porque es algo que he trabajado y no voy a botarlo todo a la basura cachai. Así que eso, el mixtape.

 

L: Me gustaría hablar de Histerya Colectiva, te has presentado en tres de las cuatro ediciones y, de alguna forma, desde cuando Histerya Colectiva era un evento muy hecho en casa y más precario, hasta cuando tuvo niveles más organizados… ¿Cómo fue esa experiencia? ¿Qué tal? Aparte creo que hay una diferencia en tu carrera desde ese punto a como estas ahora.

 

A: Yo, para la gente que no sabe, fui al 1, 2 y al 3, muy descaradamente fui al 1, 2 y al 3, por nada, hacía el mismo show todo el rato. Y nada, la Izu me había hablado como, “oye, vamos a hacer esto”, una venta de closet me dijo, jamás fue eso, pero yo acepté por la buena onda. Al principio no iba a ir, porque me había dado covid, después no tenía covid, después sí, no sé. Y fue como, “ya, voy a ir, voy a cantar”. Muy descaradamente me comí el tiempo de otro artista… y de ahí para el segundo me volvieron a invitar como, “ahora sipo”, porque igual en la primera edición yo hice así un texto: “chiquillos no me voy a poder presentar”, yo llegué igual… entonces fue como, “ya, la próxima la hacemos”. Lo mismo: me demoré caleta en subirme al escenario, me demoré media hora en montar, y tenía a la Izu como, “¡ya po’, empiecen!” y yo, “¡5 minutos, 5 minutos!” aunque la hora sonaba. 

Y ya, el tres… a mi me encanta el tres, siento que el tres es mi favorito sí o sí. Yo he ido a todos, fui al cuatro pero no fui a cantar… pero el tres, sé que para el equipo Histerya fue un cambio como “Wow, esto puede ser algo muy brígido”. Se sentía en el público, se sentía en los artistas, y nunca me voy a olvidar de eso, de que la gente hablaba como, “weon, esta wea en un año imagínate, si este es el tercero…”, decían así los artistas y nosotros como, “oh brígido”. Para mi también fue, y siempre lo digo, uno de mis mejores shows, si es que no es mi mejor show. No es el tema de como, “ay, fue super connotado”, pero es, como, la vibra que se monta. La gente me dice que tal vez es porque “eras más conocida”, pero a mi Histerya me abrió las puertas a que otros artistas me conocieran, que era también parte de los focos que yo tenía, y eso siempre obviamente lo voy a valorar. De la misma manera en la que ellos les cambió esa visión, o les cambió todo a ellos, personalmente también para mi cambió muchas cosas: desde ese día muchas cosas empezaron a cambiar en mi vida. Yo siempre tengo días en los que digo “aquí cambió esto, y aquí cambió esto”, y ese fue uno de esos días también, como que dije, como, “oh, puedo hacer bien las cosas”. Después de ese show, me fui muy feliz para mi casa, me fui a tomar o comer, no me acuerdo, pero fui, como, a celebrar la hueá, y esa hueá jamás la hago, jamás. Entonces, para mi obviamente fue muy lindo siempre haber participado en Histerya, y me encantaría que para otra ocasión obviamente presentarme en algún momento, no tiene por qué ser la quinta, sexta o séptima; puede ser la 40, cachai, y yo voy a ir igual.